Receta fácil de hummus de garbanzos
El hummus es mucho más que un simple dip; es una preparación antigua que ha jugado un papel fundamental en las dietas del Medio Oriente durante siglos. Su nombre completo, "hummus bi tahini", significa "garbanzos con tahini" en árabe, reflejando sus componentes esenciales. Aunque sus orígenes exactos son difíciles de determinar, se cree que el hummus se preparaba ya en el Egipto antiguo y que se ha disfrutado en diversas formas a lo largo de toda la región del Levante.
El hummus tradicional combina garbanzos cocidos y triturados, tahini (una pasta hecha de semillas de sésamo tostado), aceite de oliva, jugo de limón, ajo y especias como el comino o el pimentón.
Esta mezcla resulta en una crema suave y rica que puede ser adaptada y modificada de innumerables maneras, dependiendo de las preferencias personales y las tradiciones locales. Por ejemplo, en algunas variaciones, se añaden ingredientes como pimientos asados, berenjenas, o incluso remolacha para alterar el sabor y el color del hummus.
En cuanto a su preparación, el hummus es sorprendentemente sencillo de hacer en casa y se presta a la experimentación. Tradicionalmente, los garbanzos se remojan durante la noche y luego se cuecen hasta que están muy tiernos, lo cual facilita su triturado hasta alcanzar una textura cremosa. El uso de una batidora o procesador de alimentos ha simplificado este proceso, permitiendo obtener un producto final suave en cuestión de minutos.
Además de ser delicioso, el hummus es reconocido por sus beneficios para la salud. Es rico en proteínas, fibra, y grasas saludables, y se ha demostrado que contribuye a la salud cardiovascular y a la estabilidad de los niveles de azúcar en la sangre, gracias a su bajo índice glucémico. Esto lo convierte en una opción popular no solo entre quienes buscan un bocado sabroso, sino también entre aquellos que se esfuerzan por mantener una dieta equilibrada.
Con el crecimiento de la globalización gastronómica, el hummus ha trascendido sus raíces mediterráneas y se ha popularizado en todo el mundo. En la actualidad, se puede encontrar en los menús de restaurantes de todo tipo y en las estanterías de casi cualquier supermercado en diversas formas, desde las versiones más tradicionales hasta innovaciones que incluyen sabores como aguacate o chipotle.
Esta expansión ha convertido al hummus en un verdadero alimento global, disfrutado en meriendas, comidas y como parte de la tendencia de alimentación saludable en diversas culturas.
Así que, ya sea como parte de un festín en una noche de verano o como un rápido tentempié saludable, el hummus sigue siendo una preparación venerada y versátil que ha conquistado paladares en todo el mundo.
Si te gustan los dips, entonces no puedes perderte nuestra receta de crema de pimientos rojos asados o muhammara o nuestro plato de mutabal (crema de berenjenas).
Ingredientes
- 200 gramos de garbanzos cocidos
- 35 gramos de aceite de oliva virgen extra
- 30 gramos de Tahini
- 25 mililitros de agua
- ½ diente de ajo
- 2.5 gramos de sal (aproximadamente)
- 18 mililitros de zumo de limón
- 2.5 gramos de comino molido (aproximadamente)
- 1 gramo de pimentón dulce (aproximadamente)
- Sal
- Pimienta negra molida al gusto
** Dale click al play para ver el video
Cómo hacer hummus fácil y casero paso a paso

Añadimos el aceite de oliva a la batidora para crear una base líquida que facilitará la mezcla de los demás ingredientes.

Incorporamos el jugo de limón directamente en la batidora, lo que nos dará un toque cítrico y fresco.

Agregamos el agua para ayudar a suavizar la mezcla y facilitar el proceso de triturado.

Añadimos los ajos, que previamente hemos pelado, para aportar un sabor intenso y característico al hummus.

Incorporamos los garbanzos cocidos. Asegúrate de que estén bien escurridos para evitar que el hummus quede demasiado líquido.

Añadimos el tahini, esencial para conseguir esa textura cremosa y el sabor auténtico del hummus.

Agregamos el comino y el pimentón dulce, especias que enriquecen el sabor y añaden un aroma delicioso.

Añadimos sal y pimienta al gusto para ajustar el sazón de nuestro hummus.

Cerramos la batidora y trituramos los ingredientes hasta obtener una mezcla homogénea y cremosa. Es posible que necesites pausar y remover con una cuchara una o dos veces para asegurar que todo se integre bien. Si usas nuestra batidora portátil, al estar diseñada para trituración líquida tendrás que sacudirla un poco mientras tritura los ingredientes. Te recomendamos mirar el video de arriba para ver como se hace.

Ponemos el hummus en un plato. Una vez triturado, trasladamos el hummus a un plato para servir.

Añadimos un poco de aceite de oliva y pimentón espolvoreado por encima, para añadirle sabor al hummus y que quede aún más bueno. ¡Ya solo nos queda acompañarlo con un tostadas, pan o zanahoria!
Trucos para preparar el mejor hummus de garbanzos
- Usa garbanzos secos: Aunque los garbanzos enlatados son convenientes, usar garbanzos secos que tú mismo remojas y coces puede hacer una gran diferencia. Los garbanzos secos te permiten controlar la firmeza y la frescura del ingrediente principal, dando como resultado un hummus más cremoso y suave.
- Cocina bien los garbanzos: Para asegurarte de que tu hummus quede especialmente suave, cocina los garbanzos hasta que estén muy tiernos, incluso más de lo que harías para otras recetas. Esto facilita mucho el proceso de triturado y mejora la textura del hummus.
- Bicarbonato de sodio al cocer los garbanzos: Añadir un poco de bicarbonato de sodio al agua de cocción de los garbanzos puede ayudar a suavizar su piel, lo que contribuye a un hummus más cremoso.
- Usa Tahini de calidad: El tahini, o pasta de sésamo, es crucial en la receta de hummus. Invierte en un tahini de buena calidad, ya que es el segundo ingrediente más importante y afecta significativamente el sabor del plato final.
- Balancea los sabores de los ingredientes: Asegúrate de equilibrar el jugo de limón, el ajo y el tahini adecuadamente. Comienza con cantidades más pequeñas y ajusta según tu gusto, buscando un equilibrio entre la acidez, el sabor a nuez del tahini y el toque picante del ajo.
- Procesa hasta tener la mezcla perfecta: No escatimes en el tiempo de procesado. Deja que la batidora o procesador de alimentos trabaje hasta que el hummus alcance una consistencia perfectamente lisa y cremosa.
- Enfría antes de servir el hummus: El hummus suele tener mejor sabor cuando se ha enfriado durante al menos unas horas, lo que permite que los sabores se mezclen y se intensifiquen.
- Usa aceite de oliva de calidad: Finaliza tu hummus con un chorrito de aceite de oliva extra virgen justo antes de servir. Elige un aceite de oliva de buena calidad para mejorar tanto el sabor como la presentación.
- Personaliza con toppings: Aunque el hummus es delicioso por sí solo, añadir coberturas como pimentón, perejil picado, piñones tostados o un chorrito más de aceite de oliva puede enriquecer el plato y hacerlo visualmente atractivo.


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