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Receta de tortilla de calabacín y cebolla
La tortilla de calabacín es perfecta para cuando queremos comer hortalizas y verduras de una forma más original. Hace años que me gusta cocinar esta receta cuando no tengo mucho tiempo para preparar la comida o para preparar tapers cuando tengo que comer fuera.
Es una receta que se puede comer caliente o fría, con o sin pan, y que es fácil de transportar. Además, es muy saludable ya que está hecha con calabacín que tiene muchos beneficios.
Aporta vitaminas, sales minerales y antioxidantes que ayudan al buen funcionamiento de nuestro organismo.
Es muy sencilla de cocinar. Sólo necesitarás cuatro huevos, una cebolla y un calabacín. El objetivo es que quede hecha por la superficie mientras mantenemos un cierto grado de jugosidad por dentro.
Otras recetas de tortilla que te recomiendo probar son: la tortilla de patatas , la tortilla francesa , la tortilla de espinacas frescas o la tortilla de berenjena .
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Ingredientes
Cómo hacer tortilla de calabacín con cebolla
- Pelamos la cebolla y la cortamos en trocitos pequeños. Este paso depende de cómo te guste el tamaño de la cebolla. Hay gente que la pica mucho mientras que otros la cortan en trozos más grandes.
- Ponemos aceite en una sartén y dejamos calentar. Una vez que el aceite esté caliente añadimos la cebolla y la dejamos cocinar unos 5 minutos. El objetivo es que quede blanda pero que no se haga del todo ya que acabaremos de hacerlo cuando añadimos el calabacín.
- Mientras se cocina la cebolla lavamos el calabacín, lo cortamos longitudinalmente y después en rodajas (mirar foto para saber exactamente cómo debe quedar).
- Una vez el calabacín esté bien cortadito y el suyo se haya ablandado agregamos el calabacín a la sartén y lo dejamos cocinar unos 15-20 minutos a fuego medio. Es importante tapar la sartén para acelerar el proceso de cocción. A medida que se vaya cocinando el calabacín verás cómo saca agua. Es recomendable dejar que se evapore antes de sacarlo del fuego.
- Mientras dejamos el calabacín y la cebolla cociéndose, en un cuenco aparte rompimos los 4 huevos uno por uno y removemos. Lo ideal es utilizar unas varillas ya que así conseguiremos que entre más aire y la tortilla de calabacín quedará más esponjosa. Sin embargo, si no tienes unas varillas puedes utilizar un tenedor.
- Una vez hechos la cebolla y el calabacín apagamos el fuego y los echamos en el cuenco con el huevo. Removemos todo para asegurar que se mezclen bien los ingredientes y dejamos reposar 5 minutos.
- En una sartén ponemos aceite y lo esparcimos para cubrir toda la sartén. Esto servirá para que no se pegue la tortilla. Es muy recomendable utilizar una sartén antiadherente para evitar que se pegue.
- Dejamos calentar unos segundos y añadimos la mezcla de huevo, cebolla y calabacín. En este punto podemos añadir un poco de sal.
- Dejamos cocinar hasta que empiece a cuajarse. Normalmente esto ocurre al cabo de 2 minutos. Sin embargo, el tiempo exacto dependerá del tipo de sartén y de la intensidad del fuego.
- Una vez cuajado por un lado, damos la vuelta a la tortilla y dejamos que se cuaje por el otro. El truco es dejarla hasta que se haga la superficie pero que la parte de dentro esté poco hecha. Una tortilla de calabacín seca no es lo que queremos conseguir.
- Una vez hecha ya podemos poner la tortilla de calabacín y cebolla en un plato y servir a nuestros invitados. Muy recomendable acompañarla de un buen pan con tomate.
Consejos para cocinar la mejor tortilla de calabacín y cebolla
La receta de tortilla de calabacín y cebolla no es muy complicada de preparar. Sin embargo, saber algunos consejos o trucos nunca está de más.
En este apartado encontrarás todo lo que necesitas para que tu tortilla de calabacín quede inmejorable.
Dejar que se evapore el agua
El calabacín es una hortaliza que puede soltar bastante agua cuando la cocinamos. Por esta razón es vital que esperemos a sacar las verduras del fuego una vez que estén bien secas. De no ser así, aguaremos los huevos y el resultado no será el mismo.
Si vemos que no podemos esperar porque se queman los calabacín y la cebolla podemos escurrir el agua antes de mezclarlos con los huevos.
Remover con varillas
Cuando preparamos pasteles siempre recomendamos utilizar varillas para conseguir que entre el aire y que queden bien esponjosos. Pues lo mismo ocurre con las truchas. Es preferible utilizar unas varillas antes que un tenedor. De esta forma obtendremos una tortilla de calabacín más esponjosa.
Control del fuego
Una vez que se esté haciendo la tortilla recomendamos no poner el fuego demasiado alto. Una potencia suave-media será suficiente. De esta forma mantendremos un control más fino de la cocción de la trucha y conseguiremos unos resultados excelentes. Lo ideal es que la tortilla quede hecha por fuera pero que esté jugosa por dentro. Pero esto ya depende de cada uno.
Dar la vuelta
Dar la vuelta a la tortilla es seguramente el punto más crítico para la gente que nunca ha cocinado una tortilla. Lo importante es hacerlo con decisión, rápidamente y sin duda. Lo único a tener en cuenta es que el plato que usamos para dar la vuelta sea mayor que la sartén.
De no ser así, se nos caerá la tortilla y deberemos repetirla u optar por hacer un revuelto de huevo en vez de una tortilla como dios manda.
Añadir más ingredientes
Si ya hemos cocinado en muchas ocasiones esta receta y queremos cambiar un poco una recomendación es introducir otros ingredientes. Personalmente, a mí me gusta mucho poner además de calabacín un poco de patata.
Es muy sencillo, simplemente debemos sustituir una parte del calabacín por patata. También es importante controlar el tiempo de cocción ya que la patata tarda en realizarse. Podemos prepararla en una sartén aparte o en el microondas y después añadirla con el calabacín y la cebolla.